Italia 90 tenía cara de ser una gran Copa del Mundo el fútbol definitivamente había empezado a masificarse a escala industrial y ya las barreras se habían derrumbado, la sede era un país clásico en la historia de los mundiales que contaba con un equipazo para ir por la copa; lo que no se contaba era con la voluntad de Argentina que llegaba como campeona defensora y se iba a dejar la piel hasta el final.
El mundial careció de espectáculo y predominaron los esquemas defensivos y la pierna fuerte, no sobra decir que se batieron los récords de amarillas y de expulsiones. Por eso al finalizar el evento muchas personas empezaron a decir que lo mejor había sido el sorteo donde apareció la espectacular Sophia Loren y la inauguración en San Siro con la hermosa canción "Estate Italiana", la cual se convirtió en un himno a perpetuidad para los amantes del fútbol. El marcaje en zona y escalonado pasó a ser oficialmente el método de marca más efectivo y usado por lo que grandes estrellas no pudieron brillar.
Muchas selecciones defraudaron por su bajo nivel como Brasil, Holanda y la misma anfitriona Italia que contaba con los chispazos de un emergente Roberto Baggio y la efectividad de Salvatore Schilacci. Aún así equipos como Camerún y Costa Rica lograron que el público sintiera una debilidad sentimental hacia ellos y adquirieron todo ese cariño que los demás no lograban transmitir y sus eliminaciones fueron lloradas universalmente, como esas grandes películas dramáticas donde el protagonista principal muere.
Alemania desde que empezó el torneo se mostró con la eficacia típica de su historia y con la fuerza atronadora de sus pánzeres como un candidato serio para ganar el trofeo. Contaban con una defensa impenetrable por arriba, unos laterales profundos, un mediocampo con una técnica de primera y unos goleadores instintivos que no perdonaban para nada las desatenciones del rival. En primera ronda comenzaron avasallando a un gran equipo como era Yugoslavia por 4-1, luego fue un festín ante la párvula selección de los Emiratos Árabes Unidos con un 5-1 y finalmente tuvieron que esforzarse para lograr empatar 1-1 con la Selección Colombia de Maturana,Valderrama,Rincón,Huguita etc.
Ya en segunda ronda se encontraron con una Holanda que venía de ganar la Euro del 88 en Münich pero que nunca pudo encontrar el nivel óptimo para competir y a pesar de que lucharon por el partido los goles de Klinsmann y de Brehme los mandaron a casa; en cuartos de final esperaba Checoslovaquia que se había desecho con propiedad de la noble selección de Costa Rica con un Thomasz Skuhravý en estado puro, Alemania sufrió para sacar a este equipo y sólo pudo con un penal del gran Lothar Matthäus pasar a semis donde se encontró con la última gran Inglaterra. El equipo de Robson había sacado a Bélgica en octavos y en el mejor partido en cuartos de final hizo que Camerún saliera inmortalizada en la historia de los mundiales con un 3-2 electrizante, pero en Turín el fantástico Gary Lineker lanzaría su famosa frase de "El fútbol es un deporte de 11 contra 11 en el que siempre gana Alemania", los penales no perdonaron a los "Pross" y Alemania llegaba a su tercera final consecutiva.
La República Federal Argentina llegaba como campeona defensora después de la consagración de Maradona en México 86 y si bien la base de este equipo era casi la misma que había logrado el campeonato, algunos de estos bucaneros llegaban mermados por las lesiones y el socio principal de Diego el el 86, Valdano, no llegó a tiempo a la cita mundialista. Los temores se hicieron evidentes cuando en la inauguración cayeron sorpresivamente ante Camerún perdiendo el aire de favoritos, también esta derrota mostró el odio o tal vez el temor que la afición italiana del norte tenía hacia Maradona abucheando al 10 todo el partido, Diego no olvidó esta afrenta y después cobraría a su manera. Una victoria agónica ante la URSS y un empate con la ayuda de la mano del 10 argentino contra Rumanía lograban que Argentina llegase a octavos de final como uno de los mejores terceros, había perdido a Pumpido su arquero titular pero habían ganado a su reemplazo Goycochea y al rápido y habilidoso Caniggia.
En octavos esperaba la camaleónica Brasil de Sebastiao Lazaroni, que había ganado su grupo con practicidad y algo de estética pero que no convencía como sus predecesores aún así era favorita ante Argentina hombre por hombre y sin embargo Goycochea y los palos evitaron la eliminación gaúcha, por lo que el resto lo puso el genio de Maradona que con una conducción sublime asiste al pájaro Caniggia para que este anotara el único gol. En cuartos esperaba la gran Yugoslavia de Savicevic, Stojkovic, Prosinecki y Argentina aguantó como posesos hasta que en los penales el super Goyco se erigía como el héroe del equipo; en semifinales Maradona calentó el ambiente pidiendo el apoyo de los Napolitanos (su segundo hogar) pero al final estos se decantaron por su patria aunque celebraran el gol de penal de Diego, otra vez Goyco y el oportunismo del Cani mandaron a Argentina a la final en el Olímpico de Roma.
Alemania formó de la siguiente manera (4-1-3-2).
Argentina formó de la siguiente manera (4-3-2-1).
Pita el mexicano Enrique Codesal, al sonar los himnos, hay simpatía y clamor para el alemán (hay mayoría de seguidores germánicos entre el público neutral, que tira más bien para Alemania) y pitos sonoros para el argentino. Hay que tener en cuenta que Matthäus, Klinsmann, Brehme, Möller, Hässler jugaban en la Serie A. Maradona no anda con chiquitas y mientras suena el himno argentino y se escucha una pitada, la cámara de televisión le capta mascullando un legible «hijos de puta, hijos de puta» en todas las direcciones y a todo el mundo, según el 10 argentino no perdonaba los insultos de Italia hacia Argentina durante todo el mundial. Después de esto el sorteo de rigor y el saludo entre 2 genios que se admiraban profundamente. Matthäus y Maradona.
El partido no es bueno porque Argentina tiene bajas sensibles para acompañar a Maradona, Caniggia no pudo ser de la partida por una amonestación en las semifinales ante Italia, al igual que el vasco Julio Jorge Olarticoechea, vital en la zaga del equipo de Bilardo; mientras que el Kaise Beckenbauer no quería sufrir su segunda derrota consecutiva a manos del mismo rival y por eso se decidió por su equipo más ofensivo recuperando a Völler después de su encontronazo con Rojkaard en los octavos de final. El balón fue de la escuadra teutona casi todo el partido aceptando Bilardo la debilidad de su equipo.
El súper Goyco seguía en plan heroico haciendo de su arco un muro en las pocas ocasiones que Alemania lograba superar los 8 hombres que prácticamente defendían detrás de la línea del balón, sólo Maradona y Dezotti estaban menos exigidos que el resto. Diego llegaba a la final mermado físicamente por un problema el dedo gordo del pie izquierdo y aún así inflamaba patriotismo y lo que llaman en Argentina "huevos" para al menos sostener el empate y dejarlo todo en el azar de las manos de Goycochea. Al igual que en el 86 Matthäus esta vez escalonado con Buchwald marcan al genio argentino por lo que Alemania pierde en su 10 y gran colaborador para Hässler y para el hábil Littbarski.
Desde el 82 Lothar y Pierre buscan la Copa Mundo que les ha sido esquiva por una Italia superior en España y una Argentina con hambre de gloria en el 86, sin embargo todo iba a cambiar con la expulsión tonta del cabezón Monzón en el minuto 65, eso y sumado al afán de Bilardo por resguardarse haciendo la entrada de Calderón por Burruchaga un remache más, hicieron que toda Alemania se volcara con locura más no con frialdad al arco argentino y en el minuto 84 una barrida de Sensini sobre Klinsmann en el que el defensa argentino toca pelota y jugador determinan la suerte de Argentina. Brehme que patea con las dos piernas decide chutar con el pie deracho y ajustar el remate a la derecha de Goycochea haciendo inútil el esfuerzo de este, estuvo cerca la épica para el equipo de Bilardo.
Dezotti en un acto de mal perder se desquita con Klinsmann y le pega una patada descalificadora que obliga a Codesal a expulsarlo, da igual porque para Argentina sólo hay un culpable y es el árbitro, teniendo en cuenta que era muy complicado ganar en el tiempo reglamentario sólo una jugada así desequilibraría el juego y Codesal dio la excusa perfecta, la tapa de la revista El Gráfico eleva a la categoría de mitos a estos jugadores que lucharon con lo que pudieron pero que al final no pudieron contra un equipo que era superior hombre por hombre así le haya costado superarlo. Argentina y Maradona se excusaron en una conspiración de la Fifa hacia ellos por la eliminación de Italia que era la final soñada de este campeonato, algo fuerte esa acusación pero ya la vida para el genio no sería igual en Italia y después vendría el escándalo por su dopaje y la salida problemática que tuvo con Ferlaino en el Napoli, iría a Sevilla después se retiraría y volvería para USA 94 donde el dopping le jugó otra mala pasada.
Por otro lado Matthäus salió consagrado como el mejor jugador de un mundial mediocre donde el fue la luz de su equipo, tras 2 intentos fallidos tratando de alcanzar la Copa por fin como capitán podría alzar el trofeo, estuvo a buen nivel en el Inter de Milán donde alcanzaría el Balón de Oro y el Fifa World Player llegando a Estados Unidos 94 con ganas de seguir ampliando su palmarés pero la edad, los problemas internos y una gran Bulgaria los dejarían en cuartos de final; después al igual que Beckenbauer se convertiría en líbero y le alcanzaría para jugar su quinto mundial entrando en el libro de récords en Francia 98 donde una vieja y caduca selección alemana caería ante Croacia por 3-0 y 1 año después caería de forma cruel en el Camp Nou con el Bayern München 2-1 ante el Manchester United. Aún así es de los grandes jugadores totales de la historia alemana.
Andrés Rodríguez.
Twitter: @Mundialato
Publicar un comentario