San Siro se vistió de gala una vez más en la UCL dado que en el Calcio el Milan ha venido de menos a más para alentar a su equipo en el intento por tratar de alcanzar el liderato de su grupo. Esta cancha impone respeto como pocas en el mundo y el Milan salió desde el inicio a exigir ese respeto que ha venido perdiendo en el plano deportivo y al final salió con la cabeza alta tras haberlo entregado todo en la Scala Del Calcio.
Inicio con muchos bríos para los del discutido Allegri que en los primeros minutos mostró un 4-3-2-1 dado que Il Diavolo se dedicó a presionar en el campo rival a Barcelona que desplegó en San Siro a su mejor once con el clásico 4-3-3. Kaka y Birsa tenían la misión de marcar a los laterales mientras Robinho estaba en plan de perro de presa contra Mascherano y Piqué. El pasillo central iba a ser barrido por De Jong y Muntari dejando a un Montolivo un poco más abierto por derecha pero con la obligación de ser el ordenador y regulador de ese doble pivote y el catalizador cuando el Milan recuperara la pelota.
Desde un principio el Milan volvió a darle la iniciativa al Barcelona sabiendo que bloqueando a Alexis y a Neymar, los culés iban a tener que jugar horizontalmente haciendo fácil el trabajo para el mediocampo local, carecía de chispa el equipo de Martino como si quisiera anestesiar el juego y si acaso marcar por tener más la pelota más no por usarla mejor. Quería ganar por inercia, mientras que el Milan era intenso con un Muntari que salía a presionar a Xavi e Iniesta mientras que De Jong con la ayuda de Zapata o Méxes dependiendo de la zona de riesgo se encargaban de escalonar a Messi. De Neymar se encargaban Montolivo y Abate.
En eso transcurría el partido hasta que un rechazo a zona de nadie lo coge Mascherano que nadie entiende que quiso hacer y tras un pase-despeje fallido la recupera Kaka que controla excelentemente para ceder a Robinho y marcar el 1-0, quizás hasta merecido por la forma en como encaró el conjunto local el partido así hasta el momento no hubiese tenido grandes ocasiones, pero el Milan se sabía inferior al Barcelona y fue inteligente al reconocer esa inferioridad y ponerla a su favor.
El daño estaba hecho y el Milan decidió poner el 1-9-1 atrás, todos sus jugadores estaban por detrás de la línea de la pelota haciendo más fáciles las basculaciones hacia los costados y haciendo que el Barcelona tocara y tocara pero sin profundidad con riesgo a perder la pelota y quedar expuesto al contragolpe.
Brillante los 2 laterales Abate y Constant que entendieron su rol de marcadores de punta y no conceder ni un ápice a Neymar y a Alexis, aveces inclusive el equipo local se dio el lujo de salir jugando con un Montolivo que con espacios es mortífero y Kaka con Birsa no pudieron aprovechar los espacios que dejó Alves que se convirtió en un volante más, afortunadamente para Barcelona estaba Busquets espléndido en la cobertura y en el achique, precisamente de una recuperación del canterano en terreno milanés vino el empate de Messi tras un magnífico recorte a Mexes tras previa asistencia de Iniesta.
El Milan no quiso arriesgar más y el Barcelona se fue adentrando más en la maraña de piernas que defendían en un poco espacio y sólo en 2 oportunidades pudo triunfar. Una en un pase de Xavi a Messi que Zapata logra desaprovechar y otra en un pase a la espalda de Constant de Xavi que Alexis pifia en el remate.
Finalizando el primer tiempo Neymar dispuso de un remate de afuera y de una volea que pasó cerca del palo izquierdo de Amelia como sus mejores chances en el partido, de resto fue bien controlado.
En el segundo tiempo el Milan comenzó a jugar más en campo del Barcelona durante los primeros 10 minutos pero le faltaba ingenio en el último cuarto, Kaka iba decreciendo a medida que pasaba el tiempo y se le veía más extenuado y con más problemas para ayudar a Constant dado que Messi desde el primer tiempo volvió a su antiguo puesto de extremo derecho dejando de 9 a Alexis o en algunos casos a Xavi, así el rosarino tuvo más contacto con la pelota y empezó a internarse con más peligro pero siempre había una pierna salvadora de Mexes o de Zapata que evitaba el remate final. Sin embargo la mejor ocasión la tuvo Robinho en una contra de Montolivo a Muntari que deja al brasileño solo ante Valdes y a este se le pasa el balón por debajo de su pierna derecha.
Después el Barcelona respondería con un pase entre líneas made in Xavi para Iniesta que se plantó ante Amelia pero por la presión de Mexes evitó que el manchengo sacase un remate cómodo.
Con los equipos un poco extenuados tanto Martino como Allegri decidieron hacer cambios así que por los Rossoneris entraron Emanuelson y Balotelli mientras que por los blaugranas entraron Cesc y Pedro, pero el juego seguía atascado en la mitad y salvo un excelente pase al espacio de Messi donde Adriano le gana a Abate y pifia en el remate no hubo más ocasiones claras, sólo escaramuzas que fueron bien desactivadas por los centrales y los recuperadores de cada equipo.
Un 1-1 que celebró el Milan por su inmenso despliegue físico-táctico teniendo jugadores destacados como Montolivo, Muntari y un Kaka de ratos; bien en las coberturas y mejor en las basculaciones, sólo en contadas ocasiones pudo el Barcelona ganar los costados y romper los pasillos laterales. A pesar de que le quedan dos juegos por fuera el Milan debería estar en octavos de final teniendo en cuenta que volverán De Sciglio y El Shaarawy, eso sí las salidas a Glasgow y a Barcelona pueden ser difíciles pero lo más notable es que el equipo compitió bien con sus armas. Es cierto que le falta poder ofensivo y que el Barcelona quizás pudo ganar pero no fue arrollado por los catalanes y jugadores discutidos como Mexes, Zapata y Amelia estuvieron en excelente nivel.
El Barcelona le faltó profundidad y un poco más de atrevimiento de sus laterales y extremos, el mejor jugador fue Busquets por su ayuda en defensa y sus recuperaciones aunque también destacó después del gol Messi sobre todo cuando se volcó como extremo derecha asociándose bien con Alves. Xavi controló el esférico pero aveces ralentizó con el juego horizontal y eso sumado a la intermitencia de Iniesta supuso un retroceso. Por momentos la presión en campo contrario fue buena y para el clásico del sábado tendrán que acelerar más Neymar y Alexis, tampoco sorprendería la entrada de Cesc pero ya se verá.
Andrés Rodríguez.
Twitter: @richi198815
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