El tiempo va pasando y todavía no se tiene claro en el Can Barça como controlar los partidos en la etapa Martino, como diría el célebre César Luís Menotti: Tiene que decidirse si ser toro o ser torero.
Una ocasión perfecta para mostrarlo era en un partido sentimental por la herencia que la ha transmitido el Ajax a Barcelona, no hay que olvidar que Buckingham, Michels y Cruyff ayudaron al Barcelona a encontrar su identidad. Sin embargo de ese legendario Ajax sólo queda ese hermoso recuerdo a pesar de que los muchachos de Frank de Boer trataron de mostrar su mejor juego.
Una ocasión perfecta para mostrarlo era en un partido sentimental por la herencia que la ha transmitido el Ajax a Barcelona, no hay que olvidar que Buckingham, Michels y Cruyff ayudaron al Barcelona a encontrar su identidad. Sin embargo de ese legendario Ajax sólo queda ese hermoso recuerdo a pesar de que los muchachos de Frank de Boer trataron de mostrar su mejor juego.
Martino en los dos equipos de renombre que ha dirigido (Selección Paraguay y Newells) ha sido precisamente toro y torero, mientras fue entrenador de los guaraníes prefirió el fútbol físico y veloz de contragolpe dada las características de los jugadores y así pudo plantearle cara a España en el Mundial de Sudáfrica y no hablo de la copa América de Argentina donde con más suerte que fútbol llegó a la final.
En Newells trató de jugar con un estilo más de acorde a lo que el fue como jugador: posesión, presión alta, buen toque, subida de los laterales y utilización de extremos como amplificadores de juego y variantes para lograr superioridad en campo rival.
A Barcelona llegó avalado por todo los expertos en fútbol del continente suramericano porque en Europa era casi un desconocido y desde el principio manifestó que no iba a haber grandes cambios en el estilo del equipo, si algo está bien para que cambiarlo predicó sabiamente. Indudablemente se ha ido ganando a los pesos pesados del vestuario como Xavi, Pique y Puyol; renovó la confianza de Cesc Fábregas y ha ido arropando al recién llegado Neymar dándole responsabilidades a medida que su aclimatación futbolística va creciendo; por último desechó la idea de ir por un central para ayudar a Pique, Mascherano y Puyol creyendo que con ellos más Bartra y la reconversión de Adriano está bien cubierta la posición.
En los primeros partidos Martino añadió un pequeño cambio al convertir a los laterales en volantes y para que los extremos jugasen más por fuera y añadir más densidad en el medio campo, un cambio radical a lo que venía haciendo con Guardiola y con Vilanova, con eso buscaba generar una presión más alta y ganar el balón más cerca del área rival pero si se necesitaba que los delanteros comenzaran a presionar y estos después de los dos primeros partidos de liga ante Levante y Málaga bajaron esta intensidad haciendo que el primer filtro de presión quedara desarmado y a partir del partido de Mestalla se ha visto como los extremos rivales, en este caso Pabón del Valencia y Vitolo del Sevilla aprovechan la zona derecha del Barcelona donde Xavi no puede más físicamente y Alves juega casi como extremo para encontrarse con una autopista para contragolpear y llegar prácticamente mano a mano con los centrales y con Busquets.
Después de susto contra Sevilla (en realidad el susto que provocó Vitolo por izquierda) Martino decidió dosificar a Xavi y poner a un jugador más fresco como Fábregas, sacrificó control de juego y conducción por verticalidad y profundidad. Sin embargo en el primer tiempo contra el Ajax el Barcelona volvió a pecar de un problema del último tiempo, el cual es utilizar en exceso una zona del campo que en el último tiempo ha sido la izquierda, entonces Cesc se juntaba con Iniesta y con Neymar para que el brasileño encarase y sacara el balón al centro del área para que Messi o Alexis dispusieran de ocasiones para marcar pero se hizo tan repetitivo y sin cambios de orientación para mover a la defensa holandesa que apenas causó peligro y se volvió extremadamente previsible, entonces el Barcelona por primera vez en mucho tiempo y más por error que por virtud del Ajax empezó a fallar en el pase y decidió encerrarse con dos líneas de cuatro y esperar al contragolpe, esto se vio reflejado en la posesión que fue más dividida que nunca para los dos equipos y en que en los minutos finales del primer tiempo y la primera parte del segundo el Barcelona se dedicó a esperar y contragolpear. Unos minutos donde se observó un equipo impreciso y malo en la toma de decisiones.
De esta forma consiguió el segundo gol por medio de una contra liderada por Busquets y terminada por Messi pero se notaba que este nuevo estilo no terminaba de acostumbrar a un equipo que hace bastante tiempo no juega este tipo de fútbol y después del tercer gol de Piqué tras centro de Neymar, Martino decide volver al fútbol control y entró a Xavi por Cesc y a partir de este momento el Barcelona dispuso de los mejores minutos inclusive bastó para que Messi hiciera el cuarto, más sin embargo el equipo siguió careciendo de intensidad y de frescura para presionar y el Ajax pudo marcar el descuento pero se encontró con un Valdés pletórico que hasta detuvo un penal cometido por una falta ingenua de Mascherano.
Sería interesante que si Martino desea esperar y contragolpear pusiese a un jugador como Song para tener un poco de más marca y liberar a Busquets, aparte que el camerunés da una dosis importante de músculo que ayudaría a ganar choques y rebotes con su despliegue, algo que en el último tiempo no se ha visto en el Camp Nou.
Pero mientras tanto Martino tendrá que empezar a decidir si desea ser toro o torero, si desea mantener el estilo de juego o como últimamente el ha dicho añadirle otras variantes que serán bienvenidas pero todavía el equipo no las ha asimilado y mientras eso sucede se seguirá teniendo ese suspenso afortunadamente el talento individual sigue apareciendo pero no se debe caer en una excesiva dependencia de este.
Andrés Rodrígez.
Twitter: @richi198815
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