Las dos semifinales en la Liga de Campeones, arrojaron una definición abrumadora en el primer partido con los cuadros alemanes. A pesar que en el caso de los bávaros, hubo polémicas lo la legitimidad de los goles, por fuera de juego y falta previa, es innegable la superioridad en el terreno por parte del Bayern. Por su parte el Dortmund aplastó al Madrid con un intratable Lewandoski, que se ganó su lugar entre uno de los mejores nueve del mundo.
Eso se vio reflejado en la impotencia de los jugadores españoles con la acción de Jordi Alba con Robben para el Barcelona y las amarillas de Ramos y Coentrao por el lado del Madrid. Las serias falencias defensivas en los equipos españoles, les pasaron factura en los partidos que luego sería definitivo en la eliminatoria. Sin embargo el partido de vuelta para el Dortmund fue muy emocionante, con varias alternativas que se pudieron definir en cualquier instancia del partido y que el Madrid termino pagando tributo a su falta de definición. Sin embargo, apelando a la fuerza de voluntad, más que al buen fútbol el Madrid sitio al Dortmund de una forma tan intensa, que obligo a poner a todas los referentes defensivos como Kehl y Santana. A pesar de la eliminación, el Madrid dejó una buena impresión, cayendo de pie, deja algunos interrogantes con respecto a la defensa y el futuro inmediato del club.
Todo lo contrario sucedió con el Barcelona, la vuelta en España no fue más que la continuación de lo hecho en la ida, donde la acciones predominantes las manejo el Bayern donde el Barcelona apenas remató dos veces al arco y dando el partido por perdido después del gol de Robben, enfocando su atención a la liga local. Un Barcelona que estaba más preocupado por el fin del partido,para evitar más goles del rival.
La presente liga de campeones demostró que los equipos son superiores a los jugadores y que los cañones alemanes son los nuevos gobernantes del fútbol europeo, Messi y Ronaldo no pueden ser los únicos argumentos de dos equipos tan importantes a la hora de competir por la supremacía de Europa La final de Wembley albergará la primera final alemana en la historia del torneo lo cual muestra el crecimiento importante del fútbol teutón a partir del 2010, que se consolida en el presente y que envía un mensaje para el mundial del año entrante en Brasil.
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