Analizado el partido de hace 8 días en París y viendo el juego más reciente del Barcelona contra Mallorca se pensaba que la ausencia de Lio no iba a ser tan determinante viendo la influencia que había adquirido como falso 9 Cesc. Pero el buen partido del PSG y los errores no forzados de Tito Vilanova hicieron que apareciera en la escena el argentino como el superhéroe de una novela que tuvo en suspenso al Camp Nou.
Los blaugranas salieron salvo por la ausencia injustificada de Bartra con el 11 más esperado donde al menos yo pensé que la lógica del centro de ataque iba a ser Villa por izquierda, Cesc por el centro y Pedro por derecha sin embargo esto sólo fue una quimera porque los culés al querer hacer lo menos pensado terminaron por facilitar el partido a los de Ancelotti. Al jugar Cesc de falso 9 y Villa como único punta se estaban quitando espacios y se aglutinaron por el centro haciendo previsible el juego del Barcelona porque Fábregas no tiene el mismo desequilibrio de Messi si bien tiene una excelente visión de juego, por lo que la única vía de salida que quedaba era jugar por la izquierda donde Iniesta trataba de conectar con Pedro pero el sacrificio de Verratti, de Jallet y de Moura hicieron que el manchego terminara haciendo la guerra por su cuenta y el juego del Barça se volviese una continúa lateralización sin profundidad.
El PSG salió con un 4-2-3-1 donde esta vez Ancelotti le tiró las charreteras de general al italiano Verratti que fue inexplicablemente suplente en París y el italiano no defraudó a nadie porque aparecía por todos los lados pidiendo la pelota para lanzar pelotazos a la espalda de los laterales blaugranas y junto a Motta se encargaron de desactivar a Xavi que al no tener de socio a nadie por derecha salvo a un precavido y errado Alves fue perdiendo protagonismo y sin duda alguna terminó cuajando una actuación discretísima para el nivel que nos tiene acostumbrado el egarense.
Mérito enorme de los franceses fue que su primera línea de presión dejase todo por asfixiar la salida limpia que tiene Busquets, el cual tuvo su peor noche europea en mucho tiempo por lo cual el Barça perdía balones increíbles en zonas comprometedoras y así Lavezzi y Moura contaban con espacios suficientes para sorprender a la pareja improvisada de Piqué con Adriano. El PSG no tenía la misma posesión del Barça pero ante la terquedad de los culés de jugar siempre por izquierda y ante la nula presencia del juego por derecha, cada contragolpe en los pies de Verratti y de Ibrahimovic hacían que se contuviese el aliento en el Camp Nou. Ya el sueco había dejado mano a mano a Lavezzi y habían tenido otra opción los franceses por la vía área con Moura que Valdés, el cual parecía querer jugar el partido, resolvió con muy buena prestancia manteniendo al Barça con vida. Lio desde el banco se moría por jugar y sus uñas pagaron los platos rotos.
Con este panorama se terminaba el primer tiempo y se esperaba más en el segundo por parte de los culés, pero nada más lejos de la realidad porque solo Iniesta parecía estar dispuesto para atreverse en el uno contra uno y finalizar las jugadas. Cesc seguía empeñado en jugar de mediapunta y no lograba asociarse con David mientras que el inédito Xavi al ver el desbalanceo ofensivo levantaba la cabeza y apenas podía lateralizar el juego y Alves que le puso voluntad subía con el riesgo de dejarle 50 metros a Maxwell y a Pastore para que jugaran a espaldas de Busquets y de Xavi. El PSG aprovechando una jugada mal terminada por el Barça vió como Ibra avanzaba fácil ante la tibia marca de Adriano y cedía a un Pastore que aprovechaba el mal achique de Piqué para plantarse sólo ante Valdés y puntiar la pelota con maestría para colocar el 0-1 merecido.
Cundió el pánico en el Camp Nou que vió a un Barcelona peor que en el primer tiempo, un equipo que no controlaba el partido y que estaba nervioso e impreciso con afanes de querer llegar al gol como fuese, es más el PSG tuvo en una contra finalizada por Pastore el segundo cerca del minuto 60. Ante eso Vilanova decide sacar al arma secreta, si al maltrecho Messi y a Bartra, porque se había lesionado Adriano demostrando que el canterano está en este momento en un mejor momento físico que el brasileño además que conoce la posición de central y no esta ahí improvisando los modismos tácticos.
Entró Lio y con su sola presencia hizo que Iniesta y Xavi se liberaran y como el argentino por su velocidad y su desequilibrio puede jugar en cualquier posición del campo hizo que el juego fuera más balanceado, se observó más acompañado a Alves e inclusive Alba dejó a un lado su buena tarea de marcaje a Moura para poder echar una mano, era el todo o nada. El Barça ya parecía engranar lentamente y tuvo combinaciones preciosas que casi terminan en gol con Iniesta y Lio de protagonistas ante un mejor Villa que hacía las veces de pivoteador. Hasta que en el minuto 71 aparece un precioso pase entre líneas de Lio para la diagonal del guaje que no puede rematar por la presión de Alex y Thiago y con el rabillo del ojo cede a Pedro que saca un remate rabioso que se cuela en el fondo del arco de Sirigu.
Con ese empate que se celebró con rabia en el estadi, el Barça al menos ya pudo controlar los tiempos del partido e inclusive en una media ruleta de Iniesta o mejor en una chicuelina del manchego estuvo cerca de poner el 2-1 y marcar un tanto antológico; pero Lio estaba justico en su físico y al igual que el equipo no quiso arriesgar mas allá de lo civil y de lo criminal.
Ancelotti quiso refrescar e ingresó a Gameiro por Lavezzi y a Beckham por un gran Verratti para que fuese de lanzador y aprovechar alguna falta o algún corner, más sin embargo con la entrada de Song que puso músculo el PSG puso más fuerza que mente y no le alcanzó para poner en peligro serio a la puerta de Victor Valdés.
Pase sufrido el del Barcelona a las semifinales que tendrá que mejorar mucho su sistema defensivo porque los otros 3 rivales que quedan serán mucho más efectivos que este buen PSG, que poco a poco va logrando la cohesión que se espera entre estos buenos jugadores y realmente estuvieron cerca de eliminar a los blaugranas pero el solo espíritu de Messi bastó para que no pudiesen completar su gesta.
Andrés Rodríguez.
Twitter: @richi198815
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