Un partido complicado y controvertido terminó en victoria para el Real Madrid en la jornada 27 de la Liga BBVA. Estadio Benito Villamarín con capacidad para más de 50.000 hinchas, con expectativas por un partido que ponía en duda el poderío del equipo merengue, ya que fue el Betis quien puso en aprietos al FC Barcelona en jornadas anteriores con un marcador de 4-2 a favor del equipo culé.
Hay mérito para el equipo verde y blanco que en la primera parte, logró marcar primero en la portería de Iker Casillas. Gol al minuto nueve (9), de Jorge Molina en un asistencia perfecta de Rubén Castro, ayudado por un codo (involuntario) que amortiguaba la pelota y encajaba rápido el 1-0 en el Villamarín. Muchas protestas por parte del capitán blanco, Iker Casillas, pero pocos insistían en la culpabilidad de la jugada. Uno de los que más apresuraba para retomar el juego, era el técnico José Mourinho que prefirió concentrarse más en el partido y hacer menos reproches.
Minuto 24' y Gonzalo Higuaín, con gran categoría marca el gol del Real Madrid, el partido empata en el marcador y el equipo blanco (aunque en éste partido jugara con su equipación roja) impone sus contraataques de velocidad desmedida, y con una gran asistencia de Mesut Özil pone en tablas lo que era un partido impensable para el Real Madrid.
Gran estrategia del Betis, cerrando la banda del lateral izquierdo Marcelo y apretando en el medio, logró desencajar toda la estructura del Real Madrid. Un Xabi Alonso sin poder generar juego por los costados, hacía que toda la responsabilidad cargara sobre los volantes, Kaka' de gran maestría pudo sobrellevar el juego y se encargó de abrir espacios con cabeza fría, además de tener un compañero excepcional para el toque y dominio de juego como lo es Özil.
Terminó la primera parte con un resultado inesperado, con pocos remates del Real Madrid y con un Betis inspirado en remontar el marcador.
Gonzalo Higuaín celebrando su gol N° 17 Imagen tomada de "Nuevo Herald" |
Jefferson Montero, ex-barcelona se jugó el mejor partido de su carrera. Con gran marca sobre Marcelo en la primera parte, Pepe Mel decidió cambiarlo de banda y esperar más desborde con el volante venezolano. Ése fue el primer error en el planteamiento que hizo el técnico español, ya que abrió los espacios interesantes que siempre denota el Real Madrid en su juego.
Comenzaba el segundo tiempo, con leves mejorías en los planteamientos por parte del Real y del Betis. Un gran juego colectivo y pases cortos, hacía un partido más interesante, pero con pocas llegadas para los dos equipos.
Hasta que llegó el talento de Cristiano Ronaldo, que en lo que va de temporada ya está a 32 goles en el torneo. Una jugada de drible del brasileño Kaka' que con un globo por encima de la defensa, habilita a Marcelo que con un pase de borde interno, deja a Cristiano de frente a la portería para empalmar con zurda el segundo gol en la noche sufrida para el equipo de Chamartín.
Tres minutos, fue lo que duró la alegría del equipo blanco. Un tiro de esquina y un mal rechace de Álvaro Arbeloa, dejó en bandeja de plata un remate a quema ropa del venezolano Jefferson Montero, que marcaba un gol con la camiseta del Betis, para dejar una actuación de diez (10).
Lo que muchos, o más bien la mayoría espera, es que el partido se desenvuelva por una genialidad o por cualquier situación de riesgo para el rival. El físico, lo desdibujó al Betis. Una trayectoria donde el partido se gana más por fuerza y empuje, al demostrar una vez más que el Real Madrid tiene unas condiciones notables en el campo de juego, para resistir los noventa (90) minutos y romper los esquemas aún más sólidos propuestos por el equipo rival.
Ahí es donde aparece Cristiano Ronaldo, de nuevo imponiendo la fuerza física, y una racha goleadora. Un tiro de esquina ejecutado por Kaka' (que ha venido de menos a más) y cabeceado por Sergio Ramos, deja en bandeja de plata un rebote por parte del arquero Fabricio, para dejar la serie definida 3-2 a favor del Real Madrid.
Gran polémica existe por una jugada en los minutos finales, una mano dentro del área de Sergio Ramos que en mi criterio es penal. Siempre digo que la lógica que se juega en partidos como éstos, merece más que aplausos para los gladiadores del Betis y para el inquebrantable valor del Real Madrid para jugar partidos así, fuera de casa.
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