Volvió la UEFA Champions League, se juega la tercera fecha y el turno para el Manchester United era vs el Otelul Galati, un modesto club rumano que venía de perder sus dos anteriores encuentros por la UEFA Champions League y con el agravante de traer una racha negativa también en el torneo doméstico.
En la previa del partido los ánimos estaban un poco alterados, principalmente por las declaraciones del Presidente del club local, quién manifestó que lo que más le importaba era no caer humillado ante el Manchester United, el técnico y los jugadores por su lado tenían otros planes, salir a la cancha a jugarle de “tu a tu” al poderoso Manchester United, al que las intermitentes lesiones de sus jugadores le han impedido acomodarse de la mejor manera.
El Manchester United que se caracterizó por alinear a un equipo más “tradicional” en comparación con el del pasado fin de semana, con mucha memoria futbolística, al alinear de mitad de cancha para arriba, todos jugadores que llevan tiempo en el equipo (Nani, Carrick, Anderson, Valencia, Rooney, Chicharito) que están acostumbrados a jugar juntos y con el regreso a la alineación titular del capitán Vidic, este último saldría expulsado en el segundo tiempo.
Con el inicio del partido se vislumbró cual sería el panorama para el partido: Un Manchester United queriendo dominar y basando su dominio en la tenencia del balón y un Otelul que se disponía tácticamente para defenderse, lo que con el pasar de los minutos le daría resultados. El equipo local se veía muy ordenado tácticamente, aplicado en defensa, dejando prácticamente sin espacios a un Manchester que carecía de ideas a la hora de definir. Los mejores minutos del primer tiempo se vivirían a partir del minuto 35, cuando el Otelul se tomó confianza, trató de atacar en repetidas oportunidades y dejó espacios que en cierta medida fueron aprovechados por el Manchester United que remató sin fortuna en varias oportunidades.
Foto: Fanpage Manchester United - Latinoamerica |
Uno de los jugadores más destacados del encuentro fue Smalling, el polifacético jugador del United que hoy apareció como defensa central, muy limpio en su trabajo. Menciones especiales para Carrick que realizo un trabajo de desgaste notorio al lado de Anderson, buen complemento en el medio campo y también para Rooney que como siempre, se quitó el traje de superestrella y se convirtió en un obrero para llevar los hilos del equipo.
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